Como sería la vida si en realidad no estuviera vivo

Hola, quiero mostrarles aquí algo de lo que he hecho en mi más reciente hobby. Se trata de una serie de robots que vi hace poco en Pinterest, y decidí que ya tenía las suficientes habilidades para poder dibujarlos.

Debo admitir que me costaron trabajo, y siendo exigentes se pueden encontrar uno que otro pequeño defecto por ahí. Sin embargo, en general, considero que me quedaron bastante bien. Así es que aquí esta, mi propia versión de estos cuatro robots:

Estos cuatro robots me gustaron mucho porque tienen como una especie de mirada perdida, melancólica, triste; habitan en el mundo que uno prefiera imaginarse, pero en general es un mundo triste, desolado, inhabitado. Cuando los vi me hicieron reflexionar sobre como sería la vida si en realidad no estuviera vivo.

Espero les haya gustado 😁

En un mundo de Robots

Algo que he estado haciendo desde hace ya unos 6 meses, que me ha gustado mucho y cada vez se pone mejor, es un proyecto de robótica educativa, con el cual pretendo que personitas jóvenes, de primaria, secundaria y preparatoria, aprendan a diseñar, construir y programar nada más y nada menos que robots.

La verdad es que esto es más padre de lo que imaginaba. Desde el momento en que estoy imaginando las prácticas que los alumnos van a realizar en clase, la forma en que voy a impartir cada tema, y sobre todo, estar ahí, en vivo con los alumnos, divirtiéndome, bromeando con ellos, es algo fabuloso que me alegra, me llena de energía, y hace que mi vida sea un poco mejor de lo que era antes.

Y sobre todo, el simple hecho de pensar que pronto estaremos participando en nuestras primeras competencias de robótica, con grandes expectativas, ¡sería realmente fabuloso que ganemos y nos lleven de viaje a algún lugar remoto!

Pero bueno, no hay que adelantarnos. Por lo mientras, aquí está un poco de lo que se vive en este nuevo mundo al que acabo de llegar.

Definitivamente, ¡¡un mundo completamente fantástico!!

Un pequeño gran barco

Hola, aquí contándoles acerca de mi pequeño (pero no tan pequeño) barco que construí hace ya algún tiempo cuando asistía al club de modelismo naval Morisco.

Todo empezó una tarde que me encontraba caminando en el parque de Santa María la Ribera, pasé por donde tenían unas mesas y había ahí algunas personas haciendo barcos. Me acerqué a preguntar, y cuando me dijeron que yo podía hacer mi propio barco no lo pensé dos veces.

¡Y aquí está el resultado!

 

Es un remolcador que en la vida real es un barco pequeño que se utiliza como si fuera una pequeña grúa, para remolcar barcos más grandes.

A continuación les describo este pequeño barco:

• Mide aprox. 90cm de largo y algo así como 20cm de ancho y unos 40cm de altura ya con todo y mástil.
• Todo, o casi todo, está construido con madera.
• Tiene secuencias de luces led.
• Enciende un pequeño foco dentro de la cabina
• Tiene motor y un receptor de control remoto, así que ¡puede navegar en fuentes y albercas! No se le mete el agua porque está protegido contra el agua por dentro y por fuera.
• Tiene un sonido de barco. No logré amplificarlo mucho, pero creo que se escucha bastante bien.
• En la chimenea tiene un compartimiento metálico y un pequeño ventilador, para poder echarle dentro un pedazo de incienso y así conseguir el efecto de que sale humo.

Aquí se puede ver navegando en una pequeña laguna.

Esa vez el barco a media laguna dejó de avanzar. Al principio creíamos que se había quedado sin batería, pero cuando por fin lo sacamos del agua descubrimos que se le había atorado un poco de hierba en la propela. Ilusamente tratamos de sacarlo generando ondas en el agua, pero en realidad creo que al estar flotando esas ondas no empujaban al barco.

Aquí una foto del mismo en una exposición de barcos:

Es simplemente una de las cosas más fantásticas que he hecho en mi vida :)

Actualmente se encuentra en el Museo de Miniaturas Castillo de Dragones, en la ciudad de Pachuca, Hidalgo.